Matemáticas divertidas: El ÁBACO y el origen de las matemáticas.

Los números naturales surgen como respuesta a la pregunta ¿cuántos hay?. Debido a la necesidad de responder a esta pregunta, nacieron las Matemáticas. 

El comienzo de los números mediante símbolos gráficos tiene lugar al inicio de la civilización egipcia. A las órdenes del faraón trabajaban los escribas que eran profesionales de la administración del estado y para poder desempeñar sus funciones necesitaban tener conocimientos matemáticos (para la medición de tierras, cálculo de impuestos, contribuciones, cálculo de la capacidad de los depósitos de provisiones…). Para todo esto se crearon símbolos (jeroglíficos) que representaban cada número. Así desarrollaron una serie numérica y realizaban operaciones aritméticas elementales con ella.

No obstante, se considera la Antigua Grecia como la cuna de las Matemáticas actuales por ser la primera civilización que las trató como una Ciencia en sí misma y no como una herramienta de trabajo. Poseían el sistema de numeración griego, denominado ático, y otro sistema numérico, el jónico, que hacía corresponder a cada letra de su alfabeto un valor numérico. Ambos sistemas numéricos, el ático y el jónico, se empleaban únicamente para contar y numerar, puesto que las operaciones aritméticas se realizaban mediante el ábaco.

Surgen nuevos centros de producción Matemática como China e India. La máxima aportación de los matemáticos indios al saber universal es el desarrollo del sistema decimal posicional (el actual) que desde el siglo VII se irradia desde la India, primero al mundo islámico y luego sucesivamente a todo el planeta.

Lamentablemente, A partir del XIX se convierte en un instrumento poco utilizado en las escuelas de Europa, aunque todavía se emplee en Educación en Medio Oriente, Rusia, China, Japón y Corea. Se trata de un instrumento sencillo, práctico y divertido para ser utilizado como soporte en la enseñanza de las cuentas, y en el desarrollo del talento matemático desde edades tempranas. Su sistema manipulativo facilita al niño el conteo de forma física, y no abstracta, como en el caso del sistema numérico. Le permite comprender fácilmente la relación entre las unidades, las decenas y las centenas, y sus agrupaciones, como podemos apreciar en los vídeos de Santi.